Gracias a mi hermano musical Jose Mayorga, me di cuenta de que habian en este Mundo dos Avishai Cohen, que tal!!, uno es una maravilla de Contrabajista y ya lo conocieron en su trabajo de Seven Seas, bueno ahora les presento al otro Cohen, este es trompetista el cual hace su debut como líder para ECM Records y le dedica a su difunto padre el disco, Into The Silence el cual combina el trompetista con una fantástica banda propia que incluye al saxofonista tenor Bill McHenry, al pianista Yonathan Avishai, al bajista Eric Revis y al baterista Nasheet Waits.
La otra gran fortaleza del trompetista es su lirismo, que cree haber adquirido escuchando a sus maestros: "Aprendí escuchando al más grande: Louis Armstrong, Miles Davis, John Coltrane, Sonny Rollins, Monje Thelonious. Es su "lenguaje" que yo quería aprender a hablar . El tema del lirismo también está relacionado con su país de origen (Israel) y la cultura que pudo captar durante su infancia: " No juego al israelí tradicional, dejé este país a los 18 años". Pero el discurso, así como el contexto de esta música, están definitivamente anclados en mí ". Bueno señores sin mas preámbulo les presento a Avishai Cohen.
En 2016, Cohen fue nombrado "Mejor artista extranjero" por Jazz Magazine France, mientras que Into the Silence fue premiado como "Mejor álbum del año" por TSF Jazz y Academie du Jazz, y entre los 20 mejores álbumes del año por JazzTimes. Durante cuatro años consecutivos, Cohen ha sido votado como Rising Star-Trumpet en la encuesta de Down Beat Critics. Además de liderar su cuarteto, el trompetista ha liderado a Triveni (un trío con Omer Avital y Nasheet Waits) durante más de una década; así mismo, fue miembro del prestigioso San Francisco Jazz Colective durante seis años, y ha sido solista destacado en varios conjuntos especiales, más recientemente en "Jazz 100" junto a Danilo Pérez, Lizz Wright, Chris Potter y Wycliffe Gordon. También graba y recorre el mundo con The 3 Cohens Sextet, la exitosa banda familiar con su hermana, el clarinetista-saxofonista Anat, y su hermano, el saxofonista Yuval. Declarado en All About Jazz: "A los rangos de los Heaths de Filadelfia, los Joneses de Detroit y los Marsalises de Nueva Orleans, los fanáticos ahora pueden agregar los 3 Cohens de Tel Aviv". Como les parece ahora hay mas Cohen!!! En este Album estan entonces Avishai Cohem en la trompeta y Yonathan Avishai en el piano.
Empezamos el album, comenzando con "Vida y muerte". Reflexivo e introspectivo, el cuerno silenciado podría simbolizar las secuelas de la muerte, cuando se silencia una voz. El sensible solo de piano de Yonathan Avishai distribuye las notas con cuidado, transmitiendo perfectamente la fragilidad. Y justo cuando la canción parece haber terminado, la figura de bajo giratorio de Revis emerge del silencio, brindando a Avishai la oportunidad de hacer algunos comentarios más de despedida.
A esto le siguen dos piezas más largas, no ligadas al tiempo para explorar las emociones complejas que se transmiten. Es por eso que la sección de introducción de "Dream Like A Child" dura siete minutos, tiempo durante el cual se puede escuchar a Waits haciendo un trabajo ejemplar con platillos y rollos de tom suave que casi roban todo el foco de la mentalidad de Avishai de los acordes. La entrada de Cohen y McHenry señala la parte temática de la melodía, ya que Waits es aún más flexible. Cohen compensa con creces el retraso en la entrada al tocar la trompeta sublime, prestando atención tanto al tono como a la técnica, mientras que McHenry asiste en un papel armonizador.
"Into The Silence" muestra el ingenio de Waits de manera seductora. Genera una corriente de inquietud, ya sea proporcionando pequeñas señales que alteran la dirección de la canción o dando forma a esa nueva dirección. McHenry se hace eco del sentimiento de búsqueda de Cohen cuando la melodía errante retrata sentimientos no resueltos.
El bajo y el piano waltzing de "Quiescence" forman una figura que gira suavemente y Cohen hace que cada nota cuelgue y resuene. Su tono puro adorna bellamente la melodía de "Behind The Broken Glass" y McHenry ofrece un contrapunto cargado de alma.
Una de las peculiaridades del jazz de hoy es su capacidad para reunir a un gran número de oyentes de diferentes orígenes bajo la misma terminología. "Ya no hay Jazz", la palabra en realidad se convierte, como Miles predijo en los años 80, cada vez más diluida en este océano de géneros entretejidos.
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